Desde la Sociedad Internacional de Podología, comprendemos la importancia de abordar adecuadamente el espolón calcáneo, una afección frecuente que puede afectar significativamente la calidad de vida de los pacientes. Este artículo está dedicado a orientar a los profesionales de la salud en el diagnóstico y manejo eficaz de esta patología podológica.

• Realiza un Diagnóstico Preciso: El espolón calcáneo se caracteriza por la formación de una protuberancia ósea en el talón. Es crucial realizar un examen físico detallado y considerar exámenes de imagen, como radiografías, para confirmar su presencia y descartar otras causas del dolor de talón.
• Educa sobre Cambios en el Estilo de Vida: Fomenta entre tus pacientes la importancia de modificar su estilo de vida. Esto incluye la reducción de actividades que impliquen impacto en el talón, la pérdida de peso en caso de sobrepeso y la elección de calzado adecuado con soporte de arco y amortiguación.
• Implementa Terapias Físicas: Anima a tus pacientes a realizar ejercicios de estiramiento para el tendón de Aquiles y la fascia plantar. Estos ejercicios pueden aliviar la tensión y reducir el dolor asociado al espolón.
• Considera Tratamientos Complementarios: La fisioterapia, la terapia con ondas de choque y las férulas nocturnas son opciones no invasivas que pueden ser beneficiosas. Estos métodos pueden ayudar a reducir el dolor y promover la curación.
• Evalúa la Necesidad de Intervención Quirúrgica: En casos donde el tratamiento conservador no es suficiente, puede ser necesaria una intervención quirúrgica. Sin embargo, esta opción debe considerarse solo después de agotar los tratamientos menos invasivos.

Como profesionales dedicados a la podología, nuestro objetivo es proporcionar un cuidado integral que mejore la calidad de vida de nuestros pacientes y enriquezca nuestras prácticas clínicas. El manejo del espolón calcáneo requiere de una aproximación cuidadosa y personalizada, siempre centrada en el bienestar del paciente.